Esta vez FUERA de horario pico (así me salía más "barato", ponele) me fui a Londres.
Tenía planeadas un par de cosas. Una de ellas era volver a la "National Gallery", pero conociendo que hizo me iba a llevar mucho tiempo (al museo no entro a las corridas, no me quedo todo el día pero unas horitas seguro) descarté el plan A y pasé al plan B. Con un minucioso y cuidado itinerario con subtes y sus combinaciones incluidas, comencé mi tarde en Londres... que por supuesto, no salió a la perfección pero al menos, cumplí lo planeado.
Primero me fui hasta una punta, hasta Notting Hill para caminar por Portobello Road, una calle llena de mercados de todo tipo y casas de antigüedades en las pequeñas casas pintadas de colores. Pues bien, ese era mi recuerdo del 2001... se ve que debo haber ido muy probablemente un fin de semana (estoy pensando que seguro fue así ya que en los días de semana no teníamos tiempo para esos paseos porque estábamos estudiando!) la cosa es que un jueves de 2015, Portobello no era lo mismo. Casitas con antigüedades: sí. Casas de souvenirs también... pero nada de mercado o tiendas en la calle como yo recordaba y como está filmado como para que no me piense incluso yo misma que recuerdo cualquier cosa. Es pintoresco igual. El día no ayudaba.. era un día bien londinense, pero zafaba. Por supuesto había llevado paraguas por las dudas el cual no hizo falta - hasta ahora sólo viví una lluviecita molesta en Dublin y alguna que otra gotita en Cambridge. El 95 % de los días en Inglaterra, Irlanda y Bruselas amanecieron con el cielo nublado, dando la sensación que iba a llover... pero como bien dijo Matt (el de las excursiones del primer fin de semana): "Siempre parece que va a llover, aunque después no llueva"-. Estuve tentada en comprar algunas boludeces, pero era mi primer parada en Londres y no quería quedarme en ruinas tan temprano, asi que me aguanté las ganas (ganas bobas porque eran cosas innecesarias) y seguí adelante.
Tipo 3 de la tarde sentía el agujero en el estómago por el hambre pero sobre todo quería encontrar un lugar donde comer que tengan: comida simple (un sándwch, una pavada y sin jamón), barato y que tenga baño!! porque además de hambre necesitaba hacer pis, como siempre. Vueltas y vueltas sin alejarme de la parada del subte para no perder tiempo y al final terminé en McDonald's. Ahí siempre hay baño que al fin y al cabo era lo que más me importaba, y al menos las papas fritas me iban a gustar. Me encanta Starbucks a mí, dentro de todo es económico, encontré un sandwich que me gusta (es difícil para mí el tema comida porque me he pegado grandes chascos: con eso que no me gusta el jamón o no me sé todos los alimentos en inglés, o con eso que acá comen demasiado picante... la verdad, mejor un cafecito y un muffin). En fin, Starbucks me encanta, es muy rico el capuccino y además ahí siempre engancho wi fi gratis... pero no siempre tienen baño o si tienen, es de esos compartidos con niños, hombres, viejos y demás... y para baño comunitario ya me basta con el de la casa de hermana. ¡quiero un baño donde no me tenga que fijar si está la tabla meada! o al menos, ¡uno al que vayan sólo mujeres! Total si es público ya sé cómo posicionarme.
Seguí ruta para Harrods. Recordaba un lugar gigante y algo en memoria de Lady Di y su novio (el hijo de los fundadores de Harrods). Tenía bastante bien los recuerdos, aunque como ahora, con ese poco nivel que tenía y tengo para cuestiones de moda y bla bla, no había reparado que Harrods es en realidad una tienda con LAS marcas de ropa, de diseño, glamour, distinción... también venden cosméticos, relojes, joyas... todo de esas marcas inalcanzables para nosotros los mortales promedio. Me había olvidado o no sé, no había reparado a los 21 años que la tienda era más que nada de eso. Como dije, me acordaba del coso de Lady Di y sobre todo que vendían tés en latitas muy paquetas. Creo que también recordaba eso porque mi mamá aún tiene la que le traje de regalo con algo del té en hebras que también compré en 2001 y aunque esté vencido, seguimos tomando.
Con tanta marca conocida, con tanto olor a perfume de buena calidad (o al menos potente) me terminé mareando y no podía encontrar lo de Diana que sí quería volver a ver - previo haber pasado por el sector confituras y tecitos como recordaba-. Finalmente lo encontré. No recordaba una escultura de ellos dos (los difuntos) descalzos, bailando como en el cielo... pero quizás no estaba en 2001, pasaron muchos años. Sí me acordaba más o menos de la fuentecita y las fotos.
Listo! Harrods, adentro!
Lo último y no menos importante era volver al menos a ver desde afuera y sacar unas buenas fotos con mi querida Torre de Londres. La había dejado para lo último porque suponía que las otras cosas con negocios quizás cerca de las 5 ya se cerraban (acá a las 6 ya es plena noche y al menos en Cambridge los negocios cierran... y allá en Londres también porque me acuerdo ése era el problema de nosotros que nos la pasábamos en las clases en aquel 2001 y cuando salíamos que queríamos recorrer, ya no podíamos hacer mucho). En fin, mal. Harrods creo que decía cerraba después de las 7 y lo de Notting Hill... qué sé yo... eran 4 negocios.
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mirá en la espera adentro del subte qué descubrí? "Oh, me pareció ver a ... sí! es! el afiche de Relatos Salvajes. ¿Qué tul? Eso sí... ¿Lo presenta Almodóvar? ¿No es película de Szifrón? Esa es Érica Rivas, no me joden. En fin, ojalá el director no haya visto que en su afiche en plena estación de subtes de Londres él no figura ni en la letrita chiquita! (insisto: esta película está totalmente sobrevalorada... mirá las cosas que dice el cartel!! too much!) |
Bien... tras que se hacía tarde porque la tarde es corta y los corridos entre un lugar y otro, un poco largos por más subte que use... de repente, problemas justo con la línea que necesitaba tomarme para ir hasta la parada de la Torre. Después de perder más de media hora esperando que solucionasen el problema, cambié el recorrido tan bien planeado, reordené coordenadas y líneas de subte y sus combinaciones... volví para atrás, subí y bajé y después de un buen tiempo, llegué a destino. Ahí estaba. La parte de atrás de la Torre... en plena noche a las 7 pm. Fuck. "Bueh, al menos saco unas fotos" pensé y gatillé la cámara pero yo no sé qué corno estuve tocando últimamente en la Nikon que no había forma que las fotos salieran bien. Estaba lejos, muy oscuro, el flash no llegaba y ya se me congelaban las manos y la nariz estaba roja como payaso. Filmé un poco, caminé unas cuadritas nomás como para volver a ver el Puente de Londres y sentir que estuve en la ciudad y emprendí mi vuelta a Cambridge. No podía quedarme mucho más.. tenía una hora mínimo más de viaje en tren y después la caminata hasta la casa... yo tenía que llegar antes que hermana porque soy la que se queda con LA llave.
Y así hice. Subte, subte y tren que ya estaba por salir a Cambridge y me fui de Londres contenta porque sigue tan lindo y populoso como siempre... y también porque ya queda un día y vuelvo a mi casa.
Ya estoy cansada... en el otro viaje me pasó lo mismo: la tercer semana, los últimos días, los voy pateando lentamente. Ya sé que voy a ver sólo para amargarme y putear la cotidianidad, pero igual se extraña hasta eso. Y más ahora, que tengo 4 años de convivencia con un bebé de cuatro patas que extraño desde el primer día que llegue. Piensen lo que quieran. Me nefrega.
Ci vediamo!